Barra corrugada inox
Barra Corrugada ASTM-955 y Tolerancia DIN-488
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Barra Corrugada Inoxidable
La barra corrugada inoxidable es un tipo de barra maciza de acero inoxidable que se distingue por tener protuberancias o resaltes en su superficie (corrugaciones), en lugar de ser lisa. Estas corrugaciones están diseñadas para mejorar significativamente la adherencia con otros materiales, especialmente el hormigón. Combina las propiedades inherentes del acero inoxidable con la funcionalidad de una armadura de refuerzo.
-Material (Acero Inoxidable)
- Resistencia a la Corrosión: disponemos en acero inoxidable AISI 304, no se oxida dentro del hormigón, evitando la expansión y el agrietamiento del mismo, lo que la diferencia del acero al carbono.
-Diseño de la Superficie (Corrugación)
- Protuberancias: La superficie de la barra presenta resaltes o nervios longitudinales y transversales.
- Mejora de la Adherencia: La función principal de las corrugaciones es crear una mayor superficie de contacto y enclavamiento mecánico con el hormigón o el mortero. Esto es crucial para la transferencia de tensiones (tracción y compresión) entre el hormigón y el acero, permitiendo que ambos materiales trabajen conjuntamente como un material compuesto (hormigón armado).
- Evita el Deslizamiento: Las corrugaciones previenen el deslizamiento relativo entre la barra y el hormigón una vez que este ha fraguado.
-Propiedades Mecánicas y Dimensionales
- Resistencia a la Tracción: Posee una alta resistencia a la tracción y al límite elástico, fundamentales para soportar las fuerzas a las que se somete el hormigón armado.
- Maleabilidad y Doblado: A pesar de ser corrugada, debe ser lo suficientemente maleable para poder ser doblada y conformada en obra según los requisitos estructurales (estribos, ganchos, etc.).
- Diámetros Estándar: Disponemos de diámetro 3mm al 50mm.
- Sección Sólida: Al ser maciza, proporciona una robustez inherente y una capacidad de carga significativa.
-Aplicaciones Típicas
La barra corrugada inoxidable se utiliza principalmente como armadura de refuerzo en estructuras de hormigón, especialmente en entornos donde la corrosión es una preocupación crítica:
- Construcciones Costeras y Marinas: Edificios cercanos al mar, diques, puentes, puertos, cimentaciones en ambientes salinos, donde el cloruro es un gran agente corrosivo para el acero al carbono.
- Infraestructuras: Puentes, túneles, aparcamientos subterráneos expuestos a sales anticongelantes.
- Industria Química: Plantas de procesamiento, tanques, donde hay exposición a sustancias corrosivas.
- Edificaciones con Alta Humedad o Agentes Agresivos: Piscinas, plantas de tratamiento de aguas residuales.
- Arquitectura de Larga Duración: Proyectos que requieren una vida útil extremadamente larga con mínimo mantenimiento.
